Si hemos adoptado un perrito, ya sea cachorro o no, enseñarle a hacer sus necesidades en un solo lugar o fuera de la casa es imprescindible para mantener una convivencia sana e higiénica. Por eso, hoy te damos algunos tips para que tu perrito logre hacer sus necesidades donde tú quieras y en los horarios que mejor se acomoden a ti.
Ten en cuenta que un cachorro es parecido a un bebé humano, lo que significa que tardará un poco más en aprender las cosas que le deseas enseñar. Sé paciente y no castigues a tu perro por hacer donde no debe, recuerda que su educación es tu responsabilidad y el castigo no soluciona nada.
Los Horarios
Los perros son animalitos que se adaptan perfectamente a las costumbres y a las rutinas, por eso es muy importante tener un horario fijo de salidas, el cual debemos respetar todos los días si queremos que aprendan a respetar el hogar.
El primer mejor momento, es temprano por la mañana. Es el punto del día en el que es más probable que quieran hacer sus necesidades. Otro buen momento para dar un paseo sería unos treinta minutos después de las comidas.
Una buena rutina de paseos para un perrito sería:
Al despertarse por la mañana después de las 9:00 am.
A medio día, por lo general después de la 1:00 pm.
A media tarde entre las 6:00 y 7:00 pm.
Antes de dormir recomendablemente después de las 11:00 pm.
Los paseos deben durar un mínimo de 15 minutos para que nuestro perro pueda olfatear y decidir tranquilamente dónde quiere orinar o hacer popó. ¡Paseos siempre tranquilos y sin prisa!
Adaptar un lugar en casa
Si por alguna razón tu perrito no puede salir a pasear, puedes adaptar un espacio limpio y accesible, lejos de su comedero, en tu casa. Ahí puedes poner papel periódico, papel higiénico o, lo más recomendable, que son las alfombritas educadoras para perros HomeGuard de Dogit. Son a prueba de fugas, transforman el líquido en gel, neutralizan los olores y contienen atrayentes para que tu mascota sólo haga sus necesidades en ese lugar.
Los premios
Una buena manera de reforzar su comportamiento, es a través de los premios. Es decir, si salimos a pasear y hace pis o popo fuera de casa, al terminar de hacer sus necesidades debemos felicitarle y darle un premio.
De esta forma tu engreído aprenderá mucho más rápido a reconocer los lugares y los momentos en los que debe hacer sus necesidades, ya que cuando se trata de conseguir comida, su memoria es infinitamente mejor.
Olvídate de los castigos
Son muchos los perros que se orinan en casa porque aún no han aprendido bien a hacer sus cosas fuera del hogar, porque se emocionan al vernos, porque sufren de incontinencia por algún problema médico, porque beben demasiada agua o porque no los sacamos las suficientes veces.
Nunca castigues a un perro por orinarse dentro de casa, no le regañes ni tampoco te enfades, porque no sirve para nada. Simplemente limpia y sigue los pasos anteriores; así aprenderá.